Para saber más sobre este tema, de mucha relevancia para el odontólogo nacional, Visión Dental conversó en exclusiva con el ingeniero Renán Ramírez, jefe de Seguridad de la Oficina Técnica de la Autoridad Nacional (OTAN) del Instituto Peruano de Energía Nuclear (IPEN), ente encargado de supervisar y reglamentar el uso correcto de la radiación ionizante.
Según el especialista, los primeros operadores de rayos X no conocían los efectos que estos podían causar, al punto que muchos de ellos sufrieron algunos efectos de tipo directo, como dermatitis y úlceras. Se estima que entre los años 1920 y 1930, la incidencia de leucemia creció entre los radiólogos debido a la ausencia total de protección. Hoy, en cambio, los equipos le proporcionan adecuada seguridad al operador, aunque una exposición prolongada o un entorno inadecuado pueden elevar innecesariamente el riesgo de consecuencias a largo plazo" en la práctica odontológica.
"El riesgo no es tanto como en la radiología intervencionista -explica Ramírez-, la cual sí puede ocasionar riesgos directos. En odontología los equipos utilizados son de menor potencia, pero no por eso se debe descuidar la seguridad".
Sin embargo, pocos odontólogos conocen la reglamentación existente sobre la materia, como es el caso de la Ley 28028 (julio de 2003) y su Reglamento (diciembre de 2003), los cuales regulan el uso de radiaciones en los consultorios médicos y odontológicos. Precisamente, el trabajo de la OTAN consiste en fiscalizar el cumplimiento de estas normas y supervisar el otorgamiento de licencias a establecimientos y operarios. Lamentablemente, la nstitución se ha topado con dos problemas: el desconocimiento sobre protección y seguridad por parte de los odontólogos, y el subregistro, que se refiere a la existencia de equipos no debidamente registrados.
"Si hacemos una estimación grosera entre la cantidad de odontólogos en el Perú y la cantidad de equipos licenciados en esta oficina, la diferencia es abismal. Existe mucho subre-gistro. En la carrera de odontología uno puede instalar un consultorio en su propia casa y nadie puede saber si adentro hay un equipo. Se estima que la mayor parte de odontólogos tiene un equipo de rayos X. Esta es nuestra principal dificultad".

INVOCACIÓN A LOS COLEGIOS ODONTOLÓGICOS
Para corregir esta deficiencia, la OTAN ha intentado establecer coordinaciones oficiales con el Colegio Odontológico de Lima (COL) y el Colegio Odontológico de Trujillo, pero sin resultados positivos. Por esta razón, el Dr. Ramírez invocó a las altas autoridades odontológicas a cooperar con ellos: "Desearíamos que las autoridades se pongan en contacto con nosotros, porque nuestro objetivo es hacer que se cumplan las normas. Una manera de facilitar esto es a través de los mismos colegios. Estamos seguros de que los odontólogos nos harían más caso si su propio colegio se los explica, en vez de tratar con una autoridad a la que pueden considerar como 'impositiva' y 'reguladora'. Si los colegios nos ayudaran a cumplir con la normatividad existente protegerían a sus miembros y al paciente", finalizó.
Si desea tener una licencia en regla, acuda a la Oficina Técnica de la Autoridad Nacional del IPEN o escríbanos para mayor información.

Algunos requisitos de seguridad
- El límite de dosis para trabajadores expuestos no debe acceder de 20 mSv al año.

- El ambiente o sala debe tener un espesor mínimo de 15 cm de ladrillo king kong sólido, o 1 mm de plomo.

- Se debe contar con señal de advertencia de radiaciones.
w El paciente debe ser protegido con un mandil plomado y collarín de tiroides.