En esta
materia abordaremos un tema que no es rutinariamente incluido
en sus atribuciones cotidianas, pero que a nuestro entender
cabe perfectamente como una ampliación de las funciones
de la secretaria moderna y porque no, como una valorización
de su trabajo. Son aplicaciones simples y prácticas de
funciones de marketing como manera de búsqueda el encantamiento
del cliente que en el último análisis es lo deseado.
Intentaremos abordarlos de una manera fácil, ya que se
tratar de un contenido dirigido a las secretarias en sus diferentes
aprendizajes, siendo lectura recomendada para los profesionales
con el objetivo de conocer una nueva dimensión para la
función de las asistentes.
PUERTA
La puerta es una barrera. Éste es su aspecto psicológico,
que justifica toda una serie de medidas que tienen por objetivo
evitar que la puerta de la entrada de la clínica u oficina
sea motivo de bloqueo a la entrada libre de clientes. La puerta
ideal sería similar a aquéllos de hoteles de lujo
y aeropuertos en la cual al aproximarse una persona una célula
fotoeléctrica provoca la apertura automática de
la misma. Por razones de orden económica, técnica
y de seguridad, las puertas de los consultorios, clínicas
y oficinas no son así, pero deberían funcionar
como si lo fuesen.
Siendo esto así, se trabaja con una puerta cerrada. El
cliente no puede esperar mucho para que la puerta sea abierta.
Asegure el detalle que en la parte externa haya un resguardo
para los días lluviosos, la campanilla o timbre debe
funcionar siempre y bien, con volumen sonoro bueno y fácil
de identificar. La asistente o secretaria tiene la función
de detectar la primera señal de defecto, y propiciar
su reparación. El botón de la campanilla debe
estar en el lugar visible y práctico. Si no está,
debe proporcionarse una flecha indicativa a modo de orientación.
Para los casos de clínicas u oficinas que trabajan con
la puerta abiertos durante el día y no tengan recepcionista
tiempo completo para recibir al cliente, debe existir una señal
sonora para identificación de llegada, a fin de que con
su anuncio, sea dada la bienvenida y orientaciones a cuanto
tiempo aproximado debe esperar.
Otro aspecto importante, en el caso de puerta cerrada, es la
presencia del cuadro con el horario de atención fijado
en la misma. Debe estar actualizado y tener una buena presentación,
además de protección al mal tiempo y de los impulsos
mal intencionados de escritores de graffiti, a través
de un vidrio o papel adhesivo transparente. En los casos de
puerta cerrada con la llave o pasadores por cuestiones de seguridad,
es indispensable la existencia de un sistema del intercomunicación
para la identificación fácil del cliente o visitante.
En los edificios o incluso en las clínicas y oficinas
localizadas en casas, en la existencia de una puerta exclusiva
para el personal interno o de usó para la salida de clientes,
debe ser menor en relación a la de entrada, en posición
secundaria e identificada, si es necesario, por una flecha o
aviso indicativo apropiado.
Un detalle final en cuanto a la puerta; además del cuidado
para que la encargada de la limpieza la mantenga siempre limpia,
es responsabilidad de esta, no permitir que por falta de lubricación,
la puerta haga ruido cada vez que alguien entra o sale. Esto
además de demostrar dejadez, irrita a las personas que
están adentro, esperando ser atendidos. Una solución
económica y prácticas es tener y aplicar un spray
lubricador para bisagras de vez en cuando, además puede
usarse en la propia cerradura, haciendo que la llave funciones
mejor y más suave.
TELÉFONO
Graham Bell cuando inventó el teléfono pensó
en un medio de comunicación fácil y rápido
a la distancia y no en un instrumento de chismografía
y pérdida de tiempo. Para quién está intentando
llamar, no existe ninguna cosa más irritante que marcar
varias veces, recibiendo la señal de ocupado. Principalmente
por ser el teléfono de clínicas y oficinas, local
comercial y no residencial.
Siendo este teléfono comercial, no debe atenderse con
un simple “hola”, que es lo habitual en las residencias.
En su atención, se debe identificar “Clínica
del Dr. X” o “Oficina de Dr. Y”, seguido de
buenos días o buenas tardes, según el horario,
facilitando la secuencia de comunicación. A continuación
se debe, sin otras preguntas o comentarios, identificar quién
quiere hablar con quien. En el caso de orientación por
parte del profesional, para no ser interrumpido durante las
consultas, la secretaria debe proporcionar el retorno de las
llamadas recibidas, inmediatamente después del fin de
la misma. Las llamadas de amigos, proveedores, parientes u otros,
deben consultarse individualmente antes de que sean realizadas.
Siempre que sea posible, intentar identificar si el cliente
está de acuerdo que la asistente interceda, intentando
resolver la razón de la llamada sin la participación
del profesional, dejando siempre en claro que está intentando
hacerle un beneficio al cliente, porque el Dr. está atendiendo.
Al atender el teléfono, siempre hacerlo con la voz firme,
en tono mediano e intentando siempre mantener el micrófono
cerca de su boca. Un indicador que esto no está pasando
es que la persona pide repetir lo que se habló. Tener
siempre a mano, fácil y visible, papel y lapicera para
apuntar todo y cualquier mensaje. No confiar en forma alguna
en la memoria, porque son exactamente con los mejores clientes,
que imaginamos no olvidarnos, justamente con éstos, con
quien más comúnmente uno puede olvidarse de transmitir
el mensaje. Incluso con clientes y amigos habituales, que el
Dr. llama regularmente, apuntar el número de teléfono.
En caso de una persona que llama con frecuencia, el mejor procedimiento
es no preguntarle el número a él y sí consultarlo
en la agenda, anotándolo en el mensaje. Esta iniciativa,
además de demostrar mayor eficiencia de la asistente,
facilita la ejecución de la llamada, cuando es el momento
oportuno o es solicitada.
REVISTAS
Tan importante como tenerlas, es la disposición de un
lugar apropiado para colocarlas, de forma que su presentación
siempre esté demostrando organización y dedicación.
Es recomendable crear el hábito de ponerla en su lugar
a la revista dejada por el cliente que acabó de entrar
al consultorio, aunque sea una sola revista la que está
fuera de lugar. Esta práctica, además de mantener
el porta revista siempre bien ordenado, induce al próximo
cliente el hábito de conservar la organización,
que ciertamente no se obtendrá si las revistas son sistemáticamente
dejadas fuera de su lugar. Dejarlas siempre con la tapa para
arriba o al frente, si posible con el nombre del revista apareciendo,
demuestra interés, así como facilita la opción,
evitando que muchas sean retiradas del lugar para decidir cual
leerá. A los nuevos clientes, en las primeras veces es
aconsejable recomendarle alguna lectura, cuando el cliente por
su propia iniciativa no lo hace. Habiendo revistas nuevas, comentar
con el cliente cual es la más reciente y ofrecer esta
que probablemente será más de su agrado. Habiendo
publicaciones, cuidar siempre que la mas nueva esté siempre
arriba y siempre que se pueda, las demás en orden decreciente
de fecha de publicación.
Colocar etiquetas adhesivas con el nombre del Dr. y sugerencia
para que no se la lleven, contribuyendo con esto al próximo
cliente, que alguna vez puede ser él mismo, además
de ser una buena presentación, se constituye en un buen
marketing, demostrando interés para con los mismos. Cuando
una o más revistas están viejas, antiguas o con
la tapa o el interior muy dañado, comentarlo con el Dr.
para que este proporcione otras nuevas para ser cambiadas. Al
llegar las nuevas, quitar las viejas, manteniéndolas
en un lugar separado, durante algún tiempo, por la eventualidad
de que algunas sean llevadas, y tener éstas en reserva
para el caso de emergencia.
Nada contra el hábito saludable de leer de la asistente,
principalmente por ser esta una de las mejores maneras de obtener
conocimiento y huir de los diálogos monótonos
y pesados sobre el tiempo y otros asuntos sin importancia, común
en las salas de clínicas y oficinas. Pero algunas sugerencias
son oportunas: escoger una revista para su lectura solo después
de que el cliente escogido la suya. En caso de que él
devuelva la que leyó al porta revistas, ofrezca la que
usted está leyendo. Evite estar todo el tiempo que dura
la espera del cliente leyendo, pues este procedimiento le dará
la impresión que a usted no le importa las cosas de él,
así como tampoco es recomendable quedarse todo el tiempo
hablando, pues puede cansarlo, a menos que haya manifestación
expresa de él en este sentido. A las asistentes que trabajan
la mayoría del tiempo en la recepción y les gusta
la lectura, se recomienda la elección de libros, no sólo
porque en poco tiempo todas las revistas se habrán leído,
sino también por la imagen de más nivel que este
tipo de lectura da. Deben ser evitadas las revistas de tinte
político o religiosos y si fueron colocadas revistas
y periódicos sobre deportes, deben ser generales y no
de un club en particular, que puede no ser él de la preferencia
del cliente y esto devenir en comentarios o lecturas que coloquen
la preferencia del cliente en segundo plano. También
debe evitarse la colocación de revistas o periódicos
de la especialidad, visto que tiene propagandas éticas
o profesionales, que pudieran, si son leídas, poner en
duda alguna técnica o el material usados por el Dr. que
por una circunstancia puede no ser divulgado en la propaganda
vista por el cliente, además de contener la indicación
de otros nombres de profesionales que practican la misma especialidad
y eventualmente el profesional de preferencia del cliente no
ser anunciante de esta sección.
BEBIDAS
Deben ofrecerse y no ser solicitada. Es consternador, cuando
al solicitarse un café, tiene que decirse: se acabo,
está frío, el cliente anterior tomó el
último o no hay más azúcar. Con el objeto
de burlar éstas y otras situaciones, como: se tiene café
pero el cliente pide agua, hay bebidas calientes y el cliente
quiere frías, es una buena iniciativa, a la llegada del
cliente, tomar la delantera y ofrecer lo que se tiene, escapando
de los sinsabores que las situaciones anteriores proporcionan.
Aunque este no es el país del café, está
es una bebida apropiada para un consultorio u oficina. Siempre
se espera que haya sido preparado en el momento (mañana
o tarde) y no que el de la mañana sea recalentado hasta
el final del día. Si por higiene, practicidad o economía
se sirve en vasitos de plástico, éstos deben estar
preferentemente en receptáculos apropiados, siendo recomendado,
por buenos modales, el uso de una bandeja. Lo ideal es ser servido
en juegos de tazas apropiadas y, como un toque de la distinción
y marketing, acompañado de servilletas, con las iniciales
del Dr.
Una alternativa para variar es el té, que tiene la ventaja
de poder ser caliente o frío y que no denuncia, por su
sabor, si fue hecho en el momento o no. La opción de
caliente o frío, debe ser determinada de acuerdo a la
temperatura predominante en la estación. Durante los
días más cálidos y como diferencial, puede
proveerse agua fría, como opción al café
que, probablemente ya fue ofrecido en otros lugares por los
cuales el cliente ha pasado antes. Las gaseosas y las bebidas
alcohólicas no deben ofrecerse en la recepción.
El consumo de ellas, debe reservarse a las áreas internas.
Deben ser solo mencionadas por el profesional, guardándose
para este caso las limitaciones del final del día, como
un “happy hour”. Otras bebidas o hábitos
regionales, como el mate, por ejemplo, debe ser evaluada su
conveniencia por parte del coordinador del equipo, en cuanto
a su oportunismo, en este caso dictado por la preferencia de
la mayoría de la clientela.
CENICEROS
Fumar hace mal a la salud. No es sólo una advertencia
en los embalajes y propagandas de cigarrillos. Es parte de una
filosofía de esclarecimiento y concientización
a la población en un momento en que el mundo camina hacia
el futuro, optando por la calidad de vida, los principios ecológicos,
los derechos humanos, que invariablemente, pasan por la salud
corporal y mental del ciudadano.
Los profesionales liberales son parte, en un concepto amplio,
de este sistema, razón por la cual el fumar debe recibir
una atención especial. Si por un lado, se debe respetar
el derecho de fumar del cliente, permitiéndose que lo
haga en la recepción, también uno debe tener en
la mente los derechos de los clientes no fumadores, que son
la mayoría. Siendo así, la recepción dónde
se permitiría fumar debe airearse para la dispersión
fácil del humo y el aroma del tabaco; los ceniceros cuando
posible, deben ser del tipo de los que esconden las cenizas
y restos del cigarro. Cuando no, debe la asistente limpiarlos
inmediatamente después que el cliente fumador entre para
la consulta.
Para el no fumador, el olor del cigarrillo es muy desagradable,
así como para el fumador, la presencia de cigarrillos
consumidos en el cenicero es inducción a fumar. Los ceniceros
limpios son al mismo tiempo señal que el fumar es permitido
(para su presencia), como una invitación a no fumar (por
no ensuciarlos). Aunque obvio, los ceniceros de propaganda,
no son los más apropiados.
Como norma para la asistente que fuma, el fumar en la recepción,
ante clientes, sólo debe permitirse después de
identificar el hábito de fumar por parte del cliente.
Si el cliente no es fumador y la asistente tiene necesidad de
fumar, lo debe hacer en otro recinto de la clínica.
MÚSICA
Indiscutiblemente la música, por ser lo que más
intensamente toca al ser humano, esparciendo la mente y, en
muchos casos, incluso a los músculos. Si un paisaje bueno
relaja, un buen perfume estimula y una buena comida da placer,
la música apropiada crea un nuevo clima, cambia la atmósfera
completamente, dejándolo más alegre, suave y descomprimido.
No es por otra razón que las personas, cuando quieren
divertirse, buscan un lugar con buena música.
Hay que estar atento en el importante detalle del tipo de música
que mejor logra este objetivo. Indiscutiblemente, la música
suave, tocadas en las estaciones de FM, dan mejor resultados.
Tienen la ventaja de una programación elaborada por especialistas
y que buscan alcanzar un gusto universal, encontrándose
siempre con la preferencia de la mayoría. Por esta razón,
la sintonía de FM debe ser la escogida, amen, que para
esto el auxiliar deba de fijar el dial de radio con cinta adhesiva,
para evitar que el Dr. o los clientes estén cambiando
de estación. Debe de ser observado también, como
un detalle de suma importancia, el volumen con que la música
es escuchada. No debe, de ninguna manera, ser superior al volumen
de la voz habitualmente usada, lo que llevaría al cliente
y a los componentes del equipo a, continuamente, alzar el tono
de la voz para comunicarse. Para que no ocurran estas aumentan
variaciones en el volumen, puede la asistente adoptar el mismo
principio, colocar una cinta adhesiva en el botón del
volumen, de manera que permanezca inalterable, después
de identificar el volumen ideal. Otro procedimiento es colocar
el sintonizador en un lugar de difícil acceso, como ser
un armario o cajón con llave, acoplando en el lado fuera,
un interruptor para simplemente encender y apagar.
La televisión debe de evitarse, salvo casos especiales
dónde la preferencia de una mayoría aplastante
es por la TELEVISIÓN. Para los adultos, debe evitarse,
porque a algunos les gusta, a otros no, y cuando les gusta,
algunos prefieren un canal, a otros les gustaría que
lo cambiasen. Para no herir intereses, lo mejor es escoger la
música. Porque de esta todos gustan.
CARTAS
En la medida que la secretaria empieza a evolucionar en su desempeño,
ella puede empezar a sugerir y encargarse de algunas actividades
que, saliendo un poco fuera de su rutina, promueven el desarrollo
y la buena imagen. Entre éstas, una de las más
importantes, es asignarle la elaboración de modelo de
cartas y envío de correspondencia a los clientes. Esto
puede asumir importancia entre las funciones de la asistente,
y los resultados consecuentes de este trabajo ejecutado por
la asistente favorecerán el desempeño de la clínica
u oficina, inclusive financieramente.
Algunas ideas para la elaboración y envío de cartas
son tan importantes, que entendemos útil mencionarlas,
no olvidándose que la creatividad y el cambio de ideas
pueden llevar a otras todavía mejores.
La primera, que habla del respeto a una buena auxiliar (que
está sustituyendo a otra igualmente competente), es en
envío de una carta a todos los clientes, presentando
a la nueva asistente. Es una buena excusa para enviar, una buena
divulgación y algo que lo diferencia de los otros.
La segunda, que a diferencia de la primera es bastante usada,
es el envío de una carta de aviso que han pasado seis
meses de la última visita, siendo por consiguiente, el
momento correcto para el retorno del cliente a una revisión.
Exige una organización a través de la computadora,
o la elaboración de una agenda para este fin. Traerá
mayor resultado, en forma de visitas al consultorio, si se confirma
la recepción de la carta a través de una llamada
telefónica dada por la asistente y el hecho de ofrecer
al cliente la posibilidad de marcar una hora.
La tercera no involucra propiamente el envío de cartas,
pero si de tarjetas de felicitaciones que pueden ser para los
cumpleaños, la graduación, votos de Feliz Navidad
y Año Nuevo. Como actualmente pocas personas envían
tarjetas, inclusive de Navidad, éste es el momento correcto
para enviar, porque cuando alguien recibe muchas, quizá
no recuerde una en particular, pero cuando recibe pocas, las
recibidas terminan teniendo más valor, siendo inclusive
objeto de mayor gratitud.
Cuarta, está en el grupo de las diferentes, es fácil
de ser elaborada y enviada. Tener una carta lista, de gratitud
por la derivación de un paciente, cuando un nuevo cliente
menciona que fue derivado por otro, inmediatamente dirigirse
a quien derivo. Si un cliente indica a muchos otros, comentar,
si no sería interesante mandar algún presente
o recuerdo de agradecimiento.
Quinta, es indicada cuando el doctor va estar ausente durante
algunos días, para participar en algún Congreso
importante. En estos casos, el que envío de carta a los
clientes (o a los mejores clientes), con el período,
el título del Congreso y la ciudad dónde tendrán
lugar, no sólo servirá de orientación a
los clientes, también es una promoción del doctor,
por la actualización y perfeccionamiento que él
tendrá, estando presente en el referido Congreso.
Lo importante no es enviar todas las cartas, pero no estar en
la condición de nunca haber enviado una carta de estas
características a sus clientes.
PRESUPUESTOS
Todo lo que se combina no es caro. Muchos no tienen tiempo para
pasar precios de cada servicio a los clientes. Combinar la modalidad
de pago y los días en que debe ser efectuado, toma un
tiempo del profesional, que podría ser mejor aprovechado
en la atención de los propios clientes. Si consideramos
que estas negociaciones también involucran escoger los
mejores días y horarios para que el cliente pueda pagar
y ser atendido y la consulta en la agenda para verificar la
disponibilidad de estos horarios y su marcación, aumentamos
más todavía esta carga de tiempo. Por esta razón,
muchos profesionales prefieren entrenar bien a su asistente
para llevar a cabo estas funciones y dedicar más tiempo
atendiendo a clientes.
Para un buen desempeño, la asistente tiene que ser organizada,
teniendo siempre a mano una tabla de honorarios profesionales;
estar muy bien informada de cuales valores pueden pagarse en
cuotas y en cuántos pagos; saber y tener en la tabla,
cuántas visitas son necesarias para cada tipo de servicio;
cuales son los que involucran costos mayores y que precisan
pago adelantados. Tener en la computadora o en el formulario,
lugar para discriminar el presupuesto, relacionar la forma de
pago y obtener la firma de la confirmación del cliente.
Son cosas simples, pero valiosas para un mejor funcionamiento
del consultorio, clínica u oficina y que colocará
a su asistente en una condición de importancia dentro
de sus funciones.
COBRANZA
La función de cobrar, es realizada verbalmente, a veces
consterna tanto a quién cobra, como a quién tiene
que pagar, principalmente si quién está cobrando
es quién prestó el servicio. Por esta razón,
una buena fórmula de cobrar al cliente es a través
de una carta preelaborada, específica para este fin,
que tenga espacio abierto para colocar la fecha, valor, y firma
del remitente, que no necesita ser el mismo Dr. Quien la recibe
recordará y tendrá una nota de que necesita llevar
el dinero o un cheque.
Existen clientes más distraídos, que lo mismo
con envío de carta o no, se olvidan de traer el dinero.
Para éstos, una alternativa sutil es llamar un día
antes, recordando que tiene consulta y en caso de que el cliente
no haga un comentario sobre la recepción de la carta,
preguntar amablemente si la ha recibido. Para otros, que son
puntuales, pero a veces se olvida, la asistente puede, a la
salida, preguntarle al cliente si quiere confirmar el valor
del cheque o si prefiere pagar en efectivo.
Finalmente, en tiempos sin inflación, la adopción
del sistema de cheques con pagos diferidos es una alternativa
más eficaz y más practica, que tiene como ventaja
no tener que enviar cartas, recordar los pagos por teléfono
y, principalmente, con los cheques a mano, permitir al profesional
programar bien sus gastos y pagos.
RELACIONES PÚBLICAS
La propaganda es alma del negocio. No hay dudas, que la conversación
entre el cliente y la asistente es beneficiosa para ambos. Hace
pasar el tiempo, distrae, relaja y sirve como fuente de nuevas
amistades, principalmente para la asistente que a través
de la conversación, puede conocer a personas simpáticas
y agradables.
El asunto y el tipo de esta conversación, que de acuerdo
con la forma cómo se maneja, puede variar entre lo útil/inútil
(tipo: antes hacia más frío, ahora está
lloviendo más que antes, hoy está más caluroso
que ayer) y el agradable y productivo (saber lo que la persona
hace, cuales son sus actividades fuera del trabajo, que más
le gusta, como es su familia, que pretende de la vida, cuales
son sus ideales, como es su trabajo en el día a día,
etc.). Cuanto mas dirigida es la conversación con los
clientes, tanto más provechosa será en todos los
sentidos. Específicamente acerca de las ventajas para
la clínica o la oficina, pasarán cuando el asunto
es relacionado al esclarecimiento del sistema de funcionamiento
de la clínica, las ventajas de trabajar en este sistema
(de servicio) y en el logro por estar haciendo un buen trabajo
y ser más útil. En las oportunidades correctas,
exaltar las virtudes y capacitaciones del Dr., su participación
en cursos y Congresos, para su perfeccionamiento, sus logros
y conquistas, tales como: conseguir resolver los problemas graves
de clientes, siempre deja a los clientes satisfechos, fue invitado
a una conferencia, participa como profesor en la universidad
o entidad colegiada, etc., o, simplemente, decir que bien se
siente usted en donde trabaja.
Dentro de este concepto de ampliación de las funciones
de la asistente, englobando funciones de marketing, empezará
a ser más útil en la importante tarea de generar
nuevos clientes, colaborará en la satisfacción
de los actuales y participará en la mejora de ingreso
de la clínica u oficina, empezando a merecer un reconocimiento
mayor y porque no decir, tener una corrección del sueldo,
que en este caso ya será interés de ambos.